Mis caminos personal y profesional se entrelazan y van juntos, se enriquecen mutuamente y están al servicio el uno del otro.
Desde que tengo recuerdo me he dedicado a la comprensión de la naturaleza humana y sus formas de vida, así como al anhelo por contribuir al bienestar y la paz en las personas y en sus relaciones.
Estudié Trabajo Social y Antropología Social y Cultural. Me especialicé en Mediación y Gestión de la Convivencia.
Trabajé facilitando espacios de gestión del conflicto y promoción de la convivencia en distintos proyectos vinculados a la infancia y adolescencia, empoderamiento femenino, exclusión social, y en el ámbito penal y penitenciario.
En 2012 la Comunicación No Violenta me encontró y se abrió un mundo. Comencé a formarme y a compartir su práctica en distintos ámbitos muy diversos, como institutos, colegios, asociaciones familiares, organizaciones y en el ámbito penitenciario, ofreciéndola como el regalo que para mí fue conocerme a través de ella.
Comenzó a atraerme la forma de trabajo grupal, el círculo como símbolo de encuentro y sanación y me formé en Facilitación de Grupos. Acompañé procesos grupales dentro de comunidades, asociaciones y colectivos de diversos ámbitos.
En un momento de vorágine, sentí una profunda necesidad de vivir más conectada a la naturaleza y dejar la vida en la ciudad. Casi sin darme cuenta me encontré viviendo durante tres años en un pueblito del prepirineo aragonés, aprendiendo a convivir con los ciclos, cultivando la tierra, haciendo leña, trabajando la artesanía en madera con mis manos y acogiendo lo que cada nuevo día traía. Este tiempo cambió mi forma de estar en el mundo.
Entre 2017 y 2019 me formé en Kinesiología Holística, Terapia Floral y otras herramientas de acompañamiento emocional y sanación energética y comencé a acompañar personas en sesiones terapéuticas.
Desde entonces he participado en diversas formaciones que me han aportado nuevas herramientas y aproximaciones para acompañar a personas, parejas y familias en procesos de transformación de conflictos, bloqueos o dificultades que les impiden vivir la vida con armonía y paz.
En todos estos años me he formado en Crianza Consciente, Acompañamiento Emocional y Sanación de la Herida Primaria con Yvonne Laborda, Coaching terapéutico con Arnina Kashtan y su metodología de “La Brújula”, Trauma Colectivo con Thomas Hübl, método Hakomi, Focusing, Integración Relacional y Acompañamiento al trauma desde la Pedagogía de Emergencia.
En el año 2019 el volcán de La Palma puso del revés mi estabilidad, llevándose la casa donde vivía, el consultorio donde trabajaba y todas mis pertenencias. Este evento me llevó a conocer la terapia de Somatic Experiencing®, un abordaje psicobiológico para la resolución del trauma y sus consecuencias. Esta herramienta me cambió la vida y decidí realizar la formación de tres años hasta llegar a ser Somatic Experiencing Practicioner.
Desde este tiempo he trabajado como formadora de Comunicación Consciente y No Violenta en distintos colectivos, así como generando espacios de escucha y acompañamiento emocional a niñxs y adolescentes, e impartiendo cursos de comunicación no violenta, gestión emocional y sanación del niñx interior en formato online.
Todos los espacios que propongo, tanto individuales como grupales, tienen un punto en común: promover la compasión, la integración y la sanación de nuestras cargas traumáticas y bloqueos y hacer espacio a nuevas formas de encuentro, colaboración y cuidado que nos nutren y nos devuelven a nuestra verdadera esencia como humanidad.
Desde ahí continúo formándome y profundizando en el trabajo de otras personas que han sido fuente de inspiración para mí y a quienes estoy realmente agradecida. Doy gracias a mis maestros y maestras que me han acompañado a ser quien hoy soy.
Y sobre todo agradezco a todas las personas que confían en mi acompañamiento y de las cuales aprendo y crezco enormemente a través de cada encuentro.